ТОП просматриваемых книг сайта:
Psicoterapia Integrativa EIS. Roberto Opazo
Читать онлайн.Название Psicoterapia Integrativa EIS
Год выпуска 0
isbn 9789569946646
Автор произведения Roberto Opazo
Жанр Документальная литература
Издательство Bookwire
El valor de nuestros sentidos se establece en la acción. Si no les creemos a nuestros sentidos, simplemente no sobrevivimos; las excepciones a esto solo confirman la regla. Si nuestros antepasados no creían en el león y no huían, no sobrevivían; los tiempos no estaban para lujos epistemológicos. Si un escéptico no cree en la existencia del precipicio, no sobrevive. En los hechos, todos los escépticos viven como si fueran "realistas".
Esta "contradicción vital" se arrastra desde antaño: "¿Por qué se pone en marcha el sofista camino de Megara en vez de seguir tendido, simplemente soñando que se va?" (reflexiones de Aristóteles, hace 2400 años).
El propio Michael Mahoney,destacado constructivista, invita a los escépticos a cuestionar sus propias inconsecuencias: "No deberíamos hacer la locura de negar un mundo más allá de nuestro acceso perceptual. El hacerlo – y el actuar en concordancia con tal negación, cosa que ningún idealista viviente o constructivista radical ha hecho – sería literalmente amenazante para la vida" (1991, p. 112).
Las preguntas que surgen con fuerza, a estas alturas del análisis, podrían ser: ¿Por qué un escéptico – que nada sabe – puede dedicar su vida a enseñarnos acerca de cómo opera el conocimiento? ¿Acerca de lo que – según él mismo – no puede conocer en modo alguno? ¿Por qué ningún escéptico vive en consecuencia con sus propias creencias? ¿No será acaso porque no es posible vivir así? ¿No será que, si cada constructivista radical pasara de la especulación a una acción consistente con sus supuestas creencias, se extinguirían los constructivistas radicales? ¿No sería tal vez porque la realidad inexistente o incognosciblese les vendría encima? Extraña teoría esta; ninguno de sus autores y suscriptores la quiere aplicar a sí mismo. Extraña aproximación epistemológica en la cualse predica pero jamás se practica. Estas inconsistencias de la aproximación no lucen bien a la hora de conocer, a la hora de "convencer", a la hora de conseguir adeptos.
Es efectivo que, en la experiencia inmediata, no podemos distinguir entre ilusión y percepción; pero esto, a mi juicio, no invalida el conocimiento. Paradójicamente y en un sentido de fondo, este ejemplo de Maturana constituye un aporte a posturas más "realistas". Si nuestras cogniciones fueran puras ilusiones, no se las podría contrastar con percepción alguna, y se podría usar a las ilusiones inmediatas como algo a corregir a través de cogniciones más mediatas.
Lo que lo anterior explicita, es que nuestra percepción es falible, que puede y suele equivocarse.El problema epistemológico se presentaría si nunca pudiéramos enmendar el error. La propia noción de ilusión invita al contraste con lo que no lo es; y ese contraste no sería posible, sin un acceso a un conocimiento superior a la mera ilusión. El que una ilusión pueda ser "corregida", involucra la posibilidad de acceder a un conocimientomejor. Epistemológicamente hablando, importa poco en qué momento se acceda a este conocimiento mejor.En un mundo de puras ilusiones, no existiría el concepto de ilusión.
El que existan diez neuronas motoras eferentes por cada receptora aferente, no dice mucho en términos epistemológicos. El tema de fondo aquí, es si la neurona aferente logra o no cumplir con su función. Vienen al caso aquí los versos mejicanos: "La noche que la mataron / Rosita estaba de suerte: / de tres tiros que le dieron / nomás uno era de muerte".
Lo ocurrido con Francisco puede operar también en el sistema nervioso. De este modo, aun cuando solo el 10% de las neuronas fuera aferente, si ese 10% hace bien su trabajo… podría resultar suficiente.
El solo hecho que logremos saber que la proporción es 1 a 10 resulta más que sugerente. ¿Cómo podríamossaberde esa proporción, si las neuronas aferentes fueran insuficientes o simplemente inoperantes? Una contradicción más.
La afirmación de Mahoney, dicho sea de paso, tiende a entrar en conflicto con planteamientos realizados por Mlodinow. Sobre la base de la investigación existente, este autor nos informa que "Un tercio de nuestro cerebro está dedicado a procesar la información visual sensorio aferente: a interpretar colores, a detectar bordes y movimientos, a percibir profundidad y distancia, a identificar objetos, a reconocer rostros, y a muchas otras tareas" (Mlodinow, 2012, p. 35). En estas investigaciones, la información aferente adquiere un rol predominante.
Un problema no menor se presenta en el tema del córtex visual explicitado por von Foerster. Si el impulso neuronal es el mismo y la experiencia subjetiva es distinta, ¿cómo soslaya von Foerster este problema? ¿Cómo logra informarse acerca de lo subjetiva que es su propia percepción? ¿Cómo logra informarse de lo que ocurre en el córtex, si no puede tener acceso a lo que ocurre en él? No se puede argumentar – a partir de observaciones de evidencias ubicadas "fuera" – que nuestra subjetividad nos impide observar esas evidencias ubicadas "fuera".La tautología del procedimiento es la que más queda en evidencia.
El experimento de la salamandra o del sapo (enEl árbol del conocimientose habla de un sapo), nos conduce a un territorio de nuevas contradicciones. Así como el sapo tiene su ojo rotado en 180 grados, pareciera ser que las conclusiones del experimento están rotadas en los mismos 180 grados.
¿Cómo se informa Maturana, de las vicisitudes perceptuales de un sapo, el cual supuestamente solo puede "perturbar" a Maturana y jamás informarlo? ¿Cómo puede Maturana usar esa información – proveniente de un sapo que no lo puede informar – como recurso argumentativo? ¿Cómo puede Maturana negar a los seres humanos todo acceso a la información proveniente "del mundo", cuando él mismo está utilizando información proveniente del sapo? En un sentido de fondo, todo esto resulta increíblemente contradictorio.
En el capítulo 2, nos referíamos a la necesidad de que los leones tengan sus propios historiadores, que relaten sus hazañas frente a los cazadores; otro tanto se está requiriendo en el ámbito de los sapos.
Los sapos historiadores contarían – con orgullo – las hazañas de billones de sapos que han logrado atrapar, con precisión, a trillones de gusanos e insectos… a través de millones de años. Insectoscapturados en el ambiente;gusanos ubicados en unambiente"nutritivo"; ambiente que, gracias a las precisiones perceptivas de los sapos, ha constituido toda una fuente desupervivencia.
Los sapos historiadores podrían incluso ponerse autocríticos: "Es efectivo que nuestro cerebro es rígido y que nuestra evolución neurológica ha sido escasa… por lo cual somos fácilmente engañables. Pero eso no legitima el que – a partir de un sapo dañado y engañado – se pase a desprestigiar la capacidad de todos nuestros compañeros sapos para percibir su ambiente". Culminarían su argumentación señalando: "Tiene razón el Dr. Maturana, al señalar que nuestras conexiones biológicas son simplistas y rígidas; que no distinguimos el arriba del abajo y que somos incapaces de autocorregir nuestras rigideces biológicas. La verdad es que solo somos modestos sapos; no se nos pueden exigir autocorrecciones tipo Hellen Keller. Pero lo fundamental es que, rígidos o no, autocorrectivos o no, no nos dedicamos a la autocontemplación. Nos hemos manejado con eficiencia creciente en nuestro ambiente ‘sapil’; con abnegación y con dignidad, sin pedirle nada a nadie. Y si logramos cazar con precisión, cuando el ambiente es movedizo y hostil, ¿no es esto señal de que percibimos el ambiente? ¿Por qué esto no se nos reconoce? Después de estas verdaderas hazañas ambientales, ¿cómo se nos puede acusar de estar presos de nuestra biología? La verdad es que somos increíblemente precisos y eficientes en nuestro ambiente… cuando no nos hacen trampas desde un peldaño superior de la escala zoológica".
Lo medular es que la rígida correlación cerebral interna de los sapos no les ha impedido captar y cazar con precisión,