ТОП просматриваемых книг сайта:
PSICOLOGÍA DE LA COMUNICACIÓN. Alejandro López Rousseau
Читать онлайн.Название PSICOLOGÍA DE LA COMUNICACIÓN
Год выпуска 0
isbn 9789561427150
Автор произведения Alejandro López Rousseau
Жанр Документальная литература
Издательство Bookwire
• ¿Sintió algún participante que el abogado que lo representaba traicionó la posición grupal?
• ¿Cuál fue la fuente de argumentos (lógicos, morales, emocionales) más frecuentemente utilizada por ambas partes?
• ¿Es el debate un buen método para tomar decisiones de esta trascendencia? Proponga usted otros métodos.
• ¿Qué opina usted de la retórica después de este ejercicio?
Credibilidad I
Objetivo
Este juego está diseñado con el propósito de contrastar grupalmente el grado de persuasión del discurso dependiendo de la credibilidad y confianza que nos merezca el orador. Puede intervenir cualquier número de participantes y el tiempo de duración es variable.
Procedimiento
• Dividir a los participantes en cuatro grupos numerados del uno al cuatro.
• Suministrar a cada participante de un mismo grupo la misma hoja de trabajo que le corresponde según el número adjudicado a su grupo. De esta forma, al interior de un grupo todos tendrán la misma hoja de trabajo y cada grupo en sí tendrá una hoja de trabajo distinta. Cada participante leerá en forma individual el discurso detallado en la hoja de trabajo.
• Enseguida, el profesor suministrará la pauta de trabajo a cada participante.
• Una vez respondida esta pauta, los diversos participantes deberán trabajar grupalmente. El material de análisis y discusión estará dado por las respuestas individuales contenidas en las respectivas pautas de trabajo.
• Finalmente, los diferentes grupos se reúnen y contrastan sus apreciaciones unos con otros.
Hoja de trabajo 1
El siguiente fragmento fue extractado de un cuaderno de un estudiante universitario de los suburbios de París:
“... Vamos al grano: lo que llamamos “la civilización industrial” no verá el fin de este siglo. Durante algunos años más dará aún placeres dudosos y privilegios que habrá que pagar cada vez más caro. Después tendrá que acabarse; terminarán los automóviles que se cambian cada dos o cinco años; terminarán las vestimentas que no duran más de una temporada, los envoltorios plásticos o metálicos que se botan, el consumo ordinario de carne y la libertad de engendrar y concebir. Mientras más rápido llegue todo esto a su fin, mejor será. Mientras más dure, más brutal será el derrumbe de esta civilización y más irreparable la catástrofe planetaria que ella prepara.
Puede que ustedes se encojan de hombros y pongan punto final a esta lectura. Si la continúan, acuérdense de esto: otras civilizaciones se han derrumbado antes de la nuestra, por las guerras de exterminio, la barbarie, la hambruna; se han extinguido sus pueblos por haber consumido lo que no pudo reemplazarse y destruido lo “irreparable”. Acuérdense, también, que se ha predicho un atolladero absoluto para la civilización occidental e industrial, y la predicción no la han hecho políticos o ideólogos, sino demógrafos, agrónomos, biólogos, ecólogos, que a menudo tienen una comprensión tan pobre del alcance de sus cálculos que no cesan de extrañarse de la mala fe y de la hostilidad con que ellos son recibidos por los banqueros e industriales.
Hoja de trabajo 2
El siguiente fragmento fue extractado de una carta a un diario de un profesional cesante:
II... Vamos al grano: lo que llamamos ‘la civilización industrial’ no verá el fin de este siglo. Durante algunos años más dará aún placeres dudosos y privilegios que habrá que pagar cada vez más caro. Después tendrá que acabarse; terminarán los automóviles que se cambian cada dos o cinco años; terminarán las vestimentas que no duran más de una temporada, los envoltorios plásticos o metálicos que se botan, el consumo ordinario de carne y la libertad de engendrar y concebir. Mientras más rápido llegue todo esto a su fin, mejor será. Mientras más dure, más brutal será el derrumbe de esta civilización y más irreparable la catástrofe planetaria que ella prepara.
Puede que ustedes se encojan de hombros y pongan punto final a esta lectura. Si la continúan, acuérdense de esto: otras civilizaciones se han derrumbado antes de la nuestra, por las guerras de exterminio, la barbarie, la hambruna; se han extinguido sus pueblos por haber consumido lo que no pudo reemplazarse y destruido lo “irreparable”. Acuérdense, también, que se ha predicho un atolladero absoluto para la civilización occidental e industrial, y la predicción no la han hecho políticos o ideólogos, sino demógrafos, agrónomos, biólogos, ecólogos, que a menudo tienen una comprensión tan pobre del alcance de sus cálculos que no cesan de extrañarse de la mala fe y de la hostilidad con que ellos son recibidos por los banqueros e industriales...”.
Hoja de trabajo 3
El siguiente fragmento fue extractado de una conferencia de un eminente miembro de un partido ecologista europeo:
... Vamos al grano: lo que llamamos “la civilización industrial” no verá el fin de este siglo. Durante algunos años más dará aún placeres dudosos y privilegios que habrá que pagar cada vez más caro. Después tendrá que acabarse; terminarán los automóviles que se cambian cada dos o cinco años; terminarán las vestimentas que no duran más de una temporada, los envoltorios plásticos o metálicos que se botan, el consumo ordinario de carne y la libertad de engendrar y concebir. Mientras más rápido llegue todo esto a su fin, mejor será. Mientras más dure, más brutal será el derrumbe de esta civilización y más irreparable la catástrofe planetaria que ella prepara.
Puede que ustedes se encojan de hombros y pongan punto final a esta lectura. Si la continúan, acuérdense de esto: otras civilizaciones se han derrumbado antes de la nuestra, por las guerras de exterminio, la barbarie, la hambruna; se han extinguido sus pueblos por haber consumido lo que no pudo reemplazarse y destruido lo “irreparable”. Acuérdense, también, que se ha predicho un atolladero absoluto para la civilización occidental e industrial, y la predicción no la han hecho políticos o ideólogos, sino demógrafos, agrónomos, biólogos, ecólogos, que a menudo tienen una comprensión tan pobre del alcance de sus cálculos que no cesan de extrañarse de la mala fe y de la hostilidad con que ellos son recibidos por los banqueros e industriales...”.
Hoja de trabajo 4
El siguiente fragmento fue extractado de un diario de vida de un paciente internado en un hospital psiquiátrico:
“... Vamos al grano: lo que llamamos “la civilización industrial” no verá el fin de este siglo. Durante algunos años más dará aún placeres dudosos y privilegios que habrá que pagar cada vez más caro. Después tendrá que acabarse; terminarán los automóviles que se cambian cada dos o cinco años; terminarán las vestimentas que no duran más de una temporada, los envoltorios plásticos o metálicos que se botan, el consumo ordinario de carne y la libertad de engendrar y concebir. Mientras más rápido llegue todo esto a su fin, mejor será. Mientras más dure, más brutal será el derrumbe de esta civilización y más irreparable la catástrofe planetaria que ella prepara.
Puede que ustedes se encojan de hombros y pongan punto final a esta lectura. Si la continúan, acuérdense de esto: otras civilizaciones se han derrumbado antes de la nuestra, por las guerras de exterminio, la barbarie, la hambruna; se han extinguido sus pueblos por haber consumido lo que no pudo reemplazarse y destruido lo “irreparable”. Acuérdense, también, que se ha predicho un atolladero absoluto para la civilización occidental e industrial, y la predicción no la han hecho políticos o ideólogos, sino demógrafos, agrónomos, biólogos, ecólogos, que a menudo tienen una comprensión tan pobre del alcance de sus cálculos que no cesan de extrañarse de la mala fe y de la hostilidad con que ellos son recibidos por los banqueros e industriales ...
Pauta de trabajo
De acuerdo al texto leído reflexione