Скачать книгу

la potencia 30c, recién después se comienza a utilizar el dinamizador homeopático para potencias homeopáticas más elevadas (200c, 1000c, 10.000c, 50.000c, etc.). El dinamizador es un aparato mecánico que realiza la dilución en la dosis deseada y la sucusión agitando la sustancia diluida y reproduciendo la misma fuerza del golpe del puño contra una superficie dura y elástica, que es el requisito solicitado por Hahnemann.

      Así, por ejemplo, si se quiere preparar un remedio a la 10 centesimal se toma una gota de la tintura y se diluye en 99 gotas de solución alcoholizada y, posteriormente, se lo agita y de ese modo obtenemos la 1ª centesimal. De esta solución se saca una gota y se vuelve a mezclar con otras 99 de solución alcoholizada y se agita y así se obtiene la 2ª centesimal. Esta operación se repite de forma idéntica hasta llegar a la 10ª. Estos principios de preparación de los remedios ya habían sido estudiados por el alquimista Basilio de Valetín que en su libro El carro triunfal del antimonio (1610) en donde se refiere al método de sucusión y dilución. Este maestro escribió varios libros vinculados con temas alquímicos y dada la naturaleza se su enseñanza puede considerarse un antecedente de la técnica de preparación homeopática y floral. (Nota de los comps.)

      8 Esto equivale a 8 decimal que es una forma de preparación homeopática distinta de la centesimal con el mismo proceso descrito en la nota 4 pero con una base de 10 en lugar de 100. (Nota de los comps.)

      9 Por isopática se entiende la preparación de un autonosode obtenido a partir de sustancias de la enfermedad en curso del propio enfermo. (Nota de los comps.)

      10 La ley de lo semejante es un principio clave de la homeopatía pero que puede encontrarse ya en autores como Alcmeon de Crotono, Hipócrates o Paracelso. Como tal, en la homeopatía se plantea como ley general la curación por lo semejante mediante el uso de “un medicamento capaz de producir por sí mismo una afección semejante a la que se pretende curar” (Hahnemann). Años más tarde, Bach critica este principio por insuficiente, especialmente en su conferencia “Ustedes causan su propio sufrimiento”, en febrero de 1931 en Southport, ante un auditorio de médicos homeópatas. Allí expresa textualmente que no es repeliendo un error con otro error, sino reemplazando el error por lo correcto; lo bueno reemplazando lo malo, la luz reenlazando la oscuridad. Otro texto donde Bach avanza sobre la necesidad de superar el principio de curación por lo semejante es “Algunas consideraciones fundamentales sobre la enfermedad y la curación” (1930). (Nota de los comps.)

      11 Bach se refiere a la reacción a una dosis en función de la susceptibilidad y la disposición del organismo. El primer concepto alude a la capacidad de las personas de recibir modificaciones o impresiones en su energía vital a causa de agentes externos, y el segundo a la forma singular e individual de ser afectado que cada quien tiene en función de una particular predisposición. Por otra parte, por reacción debe entenderse la puesta en marcha de los mecanismos de curación del organismo que siempre se acompaña de bienestar general. (Nota de los comps.)

      12 Es interesante notar que Bach, en ese momento, ya está pensando los diagnósticos relacionando tipo de bacterias con conductas, es decir, que está suponiendo lo que afirmará más tarde: que se puede descubrir la naturaleza de la enfermedad de una persona observando sus manifestaciones. Y lo va remitir a la cuestión de la signatura y a establecer conexiones entre las marcas identificatorias de las personas y las de las plantas. En este terreno la influencia de Goethe es importante. (Nota de los comps.)

      13 En homeopatía se entiende por agravamiento la exaltación de los síntomas que sufre el paciente, provocada por varias causas, tales como el grado de homeopaticidad con el remedio semejante, la homeopaticidad parcial de un remedio similar, grado de lesionalidad del organismo, dinamización incorrecta, dosis incorrecta o repetición incorrecta. (Nota de los comps.)

      14 Con este concepto entramos de lleno en la cuestión de la predisposición miasmática, tema muy caro al pensamiento de Hahnemann. Para aclarar este punto puede consultarse al final de este artículo la nota aclaratoria del doctor Franco Rossomando. (Nota de los comps.)

       1924 La toxemia intestinal y su relación con el cáncer

      CONTEXTO Y COMENTARIOS

      En 1922 Bach renuncia a su cargo en el Hospital Homeopático de Londres. Las causas fueron varias, pero el motivo central fue que el volumen de trabajo en ese lugar era tan alto que no le dejaba tiempo para sus propias investigaciones, ya que además atendía su consultorio en Harley Street y mantenía un despacho en Nottingham Place donde recibía pacientes de escasos recursos sin percibir honorarios. Por ese entonces tenía 36 años y muchos colegas habían comenzado a llamarlo el segundo Hahnemann, por sus aportes a la ciencia homeopática. Este cambio lo llevó a instalar un laboratorio en Park Crescent, Portland Place, donde preparaba personalmente sus vacunas, enseñaba a médicos extranjeros que querían aprender sus métodos terapéuticos y daba consultas.

      Durante 1923 Bach experimentó con toda una serie de herramientas curativas sin que ninguna lo convenciera especialmente de sus bondades, y paralelamente estudió los efectos de la dieta sobre la salud y la enfermedad. Muy posiblemente en este tema exploró los aportes de la ayurveda. Bach recomendaba comer crudo, frutas, nueces, cereales, vegetales, y consumir mucha agua para ayudar a la limpieza de las toxinas intestinales. Justamente en su trabajo “La toxemia intestinal y su relación con el cáncer” aborda el tema de la combinación de dieta y vacunas como herramientas curativas, aunque está centrado casi totalmente en la sana alimentación. Esta conferencia, que luego apareció publicada en el British Homoeopathic Journal, fue su presentación en el Congreso Homeopático Británico que se realizó en la ciudad de Londres en octubre de 1924.

      Uno de los temas abordados en esta disertación es el del terreno necesario para que la enfermedad se manifieste, es decir, la cuestión de la predisposición y el miasma. La enfermedad no tiene una causa cercana o inmediata sino que es un resultado, y va precedida por un cuadro cuyos síntomas varían de acuerdo con el terreno sobre el cual evolucionan. Sobre esta idea volverá en otros trabajos. También es necesario prestar atención a la afirmación de Bach acerca de que “Nuestro objetivo no es curar el cáncer, nuestra meta es prevenirlo”, que se enlaza con una propuesta de medicina natural que se remonta al menos hasta Hipócrates, una idea que relanza en sus escritos florales.

      Hemos agregado una nota aclaratoria sobre la la toxemia intestinal, la alimentación y el cáncer, que ilustra, en función de los desarrollos científicos actuales, el valor de los aportes de Bach en este trabajo.

      La toxemia intestinal no es un tema nuevo. Durante los últimos cien años se ha trabajado mucho en ella, tanto médica como quirúrgicamente, en un esfuerzo por contrarrestar sus efectos dañinos. Al volver a los primeros días de nuestra profesión médica hallamos tratamientos y drogas que tenían como objetivo, como único y principal propósito, la limpieza del intestino. Pero a medida que se reconoce la importancia de este estado y se trabaja más en ello, nos vemos más capacitados

Скачать книгу