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Interestatal. Stephen Dixon
Читать онлайн.Название Interestatal
Год выпуска 0
isbn 9789877121995
Автор произведения Stephen Dixon
Жанр Языкознание
Издательство Bookwire
Llama a su esposa y le pide que vuelva, “Ya me harté de buscar a esos tipos y primero que nada voy a conseguir un empleo y volver a poner mi vida en orden”, pero ella dice que no puede, que todo se acabó, es mejor que se divorcien, pues él ha mostrado algo de sí mismo en todo esto –no importa cuán terribles puedan haber sido las circunstancias para provocarlo– que ella no quiere arriesgarse a experimentar nunca más. Él ha hablado con su hija casi todos los días desde que ella y su mujer se fueron, mayormente apenas: “¿Cómo estás?” “Bien”, “¿Qué has estado haciendo últimamente?” “Cosas”, “¿Algo en particular?” “No mucho”, “¿Tal vez algo nuevo sobre lo que quieras contarme?” “Hoy no”, “¿Cómo te está yendo en la escuela?” “Todo bien”, “¿Y tu mami?” “Está bien, supongo”, “¿Por qué, le pasó algo?” “No, todo está igual”, “Te quiero, mi amorcito” “Yo también te quiero, papi”, y también ahora pide hablar con ella y le dice que la ama, “no es nada nuevo para ti, ya lo sé, pero como a nadie sobre la tierra, ni siquiera a tu mami, y amé a tu hermana tanto como te amo a ti, y siempre seré un hombre roto por culpa de lo que pasó ese día con ustedes dos en la autopista, ¿sabes lo que es un hombre roto en el sentido que lo dije?”, y ella dice que cree que lo sabe, “no quiere decir partido al medio como un palito sino que es sobre la tristeza”, y él dice: “Aunque por supuesto también sé todo lo horrible que fue y que debe seguir siendo para ti eso que pasó, tan horrible como para mí, y me gustaría que estuvieras conmigo así podría ayudarte y tú, con solo estar conmigo y tal vez con alguna de las cosas que dirías, podrías ayudarme, ¿entiendes lo que quiero decir, mi dulce, o solo estoy siendo estúpidamente complicado otra vez?”, y ella dice: “Entiendo, pero no puedo hacer eso que dices porque tengo que estar con mami”, y él dice: “Lo sé, y yo también quiero que estés con ella, pero me gustaría que pudiéramos estar todos juntos otra vez, no solamente con Julie, por supuesto, pero si eso es imposible, entonces al menos los tres que quedamos”, y ella dice: “Mami dice que no podemos, y no sé por cuánto tiempo, pero ella desearía lo mismo sobre Julie”, y él dice: “Probablemente ahora mismo tampoco quieres estar sola conmigo… está bien, no tienes que contestar a eso, no quiero ponerte en el brete, ¿y sabes lo que eso quiere decir… o sea, lo del brete?”, y ella dice: “Puedo imaginarme”, y él dice: “Porque tú ves que es obvio que yo sigo fuera de mí con todo esto, quiero decir afligido, quiero decir sintiéndome miserable, esta historia de la autopista, y es por eso que digo que entiendo por qué no querrías estar sola conmigo ahora, debe asustar, aunque por favor nunca te asustes de mí, pero muy pronto volveré a estar casi casi totalmente normal y luego tal vez casi totalmente normal, y casi totalmente normal y normal son más o menos lo mismo, aunque siempre sin contar una parte por tu hermana, por supuesto, lo cual está bien y es normal, y también sin contar lo que esto les causó a mami y a ti, y sin embargo no lo suficiente como para que vuelva a ser, ni cerca, normal”, y ella dice: “Papi, no entiendo nada de lo que estás diciendo ahora”, y él: “De todos modos, lo que estoy diciendo es que cuando haya vuelto a ser casi lo que era, lo cual posiblemente suceda muy pronto, puedes venir a quedarte conmigo, la mitad del tiempo con tu mami y la mitad conmigo”, y ella: “Veremos”, y él: “Entonces solo los fines de semana, o algún que otro fin de semana y los veranos o un mes de cada año”, y ella dice: “Tampoco sé nada sobre eso, tendrás que discutirlo con mami”, y él dice: “‘Discutirlo’, ay, eso me encanta, te estás poniendo tan grande y despierta que también por eso quiero que estés conmigo, ahora o muy pronto, antes de que crezcas realmente y cuando ya no necesites estar más con tus padres, tan solo te perderé naturalmente de la misma manera que te perdería incluso si mami y tú estuvieran viviendo conmigo”, y ella: “Tal vez, no estoy segura de eso”. “Ya sabes”, dice él, “aunque tal vez no, a menos que tu mami te lo haya dicho, pero casi atrapo al conductor de aquel auto… aquella camioneta, una miniván, una Ford resultó ser”, y ella: “No, no lo sabía, mami probablemente no quería que supiera”, y él: “Bueno, seguramente tiene razón, pero la camioneta era mucho más rápida que nuestro viejo cascajo y no dudo de que estuviera modificada, que es cuando hacen algo para incrementar la potencia del auto, así que se escapó. Además iba por la misma autopista, aunque tal vez no debería entrar en más detalles o recordarte siquiera cualquier cosa que tenga que ver con eso, pero estaba decidido, te lo juro, a estrellarme contra esa camioneta para empujarla a la banquina –ya había chocado contra ella con nuestro auto– y luego a estrangularlo hasta dejarlo casi muerto o pegarle con ese bate de béisbol para niños que llevo conmigo en el auto precisamente para eso, no me importaba, y entregarlo a la policía pero no matarlo, como realmente habría querido, porque mucho más querría agarrar al tipo que mató a tu hermana y pensé que podría sacarle quién era el otro, o que la policía podría hacerlo, o el tribunal, cuando llevaran a este tipo a juicio, pero ¿tú qué piensas?”, y ella dice: “¿Quieres decir que el otro tipo no estaba con él?”, y él dice que no y ella dice: “Aun así, deberías dejar de preocuparte por eso, papi… deja a esos hombres en paz, podrían matarte ellos primero, la próxima vez, son tan malos”, y él dice: “Tu mami me dijo eso mismo hace tanto tiempo, no recuerdo cuándo, de manera que probablemente también te lo dijo a ti, porque esas fueron sus palabras casi exactas”, y ella dice: “Incluso si lo hizo, y esto es solo lo que yo pienso ahora, lo que quieres hacerles a esos hombres no ayudará en nada a Julie. Ella está muerta y tú deberías ir sabiéndolo”, y él dice: “¿Qué crees?… por supuesto que lo sé, pero atrapar a esos hombres haría maravillas por mí, te diré, porque no puedo vivir sabiendo que esos tipos siguen andando por ahí, tal vez pasándola bien, quizás incluso presumiendo sobre lo que hicieron sin que nadie los castigue por eso, y quizás incluso se habían olvidado de lo que hicieron hasta que yo choqué la camioneta de ese conductor, o siguen haciéndoselo a otros autos aunque no he leído nada en los diarios sobre algo como eso, pero podrían haber trasladado esas matanzas dementes a las calles –eso pasa todo el tiempo– o a otras autopistas en otros estados, ¿y cómo íbamos a tener noticias de eso, a menos que se lo hiciesen, no sé, a diez autos en un día?, pero por ti voy a hacer lo que dices y dejaré de preocuparme por eso. Tienes razón, cariño, tienes razón sobre prácticamente todo, caramba pero qué niña tan lista y sabia tengo, pero te diré un pequeño secreto: desistí de encontrar a esos tipos tan pronto como esa rata de conductor se me escapó, así que como le dije a tu mami, ya no ando por la autopista buscándolos”, y ella dice muy bien.
Consigue un empleo y unos tres meses más tarde va camino a su trabajo cuando ve salir a dos hombres de una miniván celeste sin ventanillas excepto adelante, los dos muy parecidos –desde más o menos una cuadra de distancia– a aquellos tipos de la camioneta blanca: las mismas edades al parecer, anteojos de sol aunque desde esta distancia no puede ver si son oscuros, y a medida que se acerca sus caras y sus sonrisas y la frente prominente del conductor parecen las mismas. Los rebasa lentamente, están charlando en la vereda, sonríen con una gran sonrisa de connivencia y chocan sus diestras en el aire como ha visto hacer a los atletas después de un juego realmente bueno, y luego se separan y caminan en direcciones contrarias por la vereda, puede verlos por el espejo de su derecha y luego en el retrovisor, cuando lo gira para que muestre más del lado derecho, y aunque no tienen bigotes y llevan puestas unas gorras de béisbol en lugar de los sombreros estilo fedora, son ellos, no hay posibilidad de error. No sabe qué hacer, mientras aminora casi hasta arrastrarse: atrapar a uno de ellos de alguna manera y mejor aún al tipo que mató a su pequeña, y que a través de él la policía pueda llegar muy pronto al