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peculiar en cuanto al diseño geométrico, también parece haber tenido una construcción subterránea bajo una escalera. En 2001 se realizaron unas investigaciones con instrumentos de georadar y gravímetros en la iglesia de Osterlars, confirmando la existencia de una enorme estructura subterránea por debajo del edificio. Estas investigaciones replicaban otras realizadas en Rennes-le-Château, donde se descubrió una cripta en el subsuelo de la iglesia, así como la existencia de un posible baúl o cofre debajo de la torre de Magdala de Sauniere. Todo apunta a la existencia de un vínculo entre Osterlars y Rennes-le-Château..., y es probable que los templarios escondieron sus tesoros en diferentes sitios.

      Otro emplazamiento relacionado con los templarios y su tesoro es la capilla de Rosslyn, en Escocia. Se ha constatado la posibilidad de que existiera una cripta en el subsuelo del santuario. Esta cripta sería más grande que la capilla y, según el tratamiento informático de su planta con programas CAD, sería una réplica, a escala reducida, de la del templo de Salomón. Hasta la fecha, el Rosslyn Chapel Trust (Fundación de la Capilla de Rosslyn) no ha podido llevar a cabo una investigación en toda regla por no contar con los permisos pertinentes del Gobierno de Escocia.

      Geometría invisible

      Los planos de las plantas de las iglesias de la isla de Bornholm muestran que han sido construidas en tres círculos. Dentro del simbolismo de la geometría sagrada, los tres círculos representan, en el caso del cristianismo, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. La distribución de estas iglesias sobre la isla, que tiene forma de cuadrilátero, responde a un diseño geométrico. La línea que une las dos iglesias más orientales cruza la línea que une las otras dos iglesias formando un ángulo de 30 grados con una precisión del 99,6 por ciento. Este ángulo es muy corriente en la geometría sagrada, ya que es parte de la formación de la estrella de seis puntas de David.

      Los investigadores Erling Haagensen y Henry Lincoln, danés e inglés respectivamente, autores de The Templars’ Secret Island (La isla secreta de los templarios), han estudiado a fondo la isla de Bornholm y sus vínculos con Rennes-le-Château. En sus prospecciones, pudieron encontrar estrellas invisibles de 5, 6 y 7 puntas, en cada caso interrelacionando diferentes iglesias de la isla. En el caso de la estrella de cinco puntas, la isla de Christiansoe, a unos 20 kilómetros de la costa norteña de Bornholm, estaría en un eje que pasa por el medio de la punta situada al lado de esta costa norteña. No hay evidencia de que Christiansoe estuviera habitado cuando se construyeron las iglesias de Bornholm. No obstante, antes de 1684, cuando el rey danés Christian V estableció una base militar en la isla, su nombre era Kirkholmen (isla de la Iglesia). Según una carta actualmente en el Archivo Nacional de Dinamarca y escrita en 1756 por el capitán Herman Bohn Wolfsen, comandante de la base de Christiansoe, antes de dinamitar una zona de rocas para utilizar la piedra en la construcción de un muro, él había visto una gran roca plana sobre la cual alguien había tallado un enorme brújula en cuyo centro había un orificio para colocar un palo con una veleta. La talla en cuestión habría estado en el centro de la pequeña isla y justo al extremo del mencionado eje. Este descubrimiento parece probar que las iglesias de Bornholm no fueron construidas aleatoriamente y que prueban la estancia de los templarios en esta zona.

      La capilla de Rosslyn, clave del Nuevo Jerusalén

      En el norte de Escocia, cerca de Aberdeen, hay una pequeña capilla en el pueblo de Rosslyn, considerada como el monumento emblemático más importante de la masonería internacional, debido a la gran variedad de símbolos masónicos que contiene. Dicha capilla fue fundada por William Sinclair, y su construcción empezó hacia 1447. Este noble escocés era el último príncipe de las islas Orkney, así como canciller real de la Corona escocesa. Fue también patrón de la masonería en Europa y Gran Maestre e iniciado en el grado más alto. Al principio, la capilla de Rosslyn iba a ser una de las siete grandes catedrales construidas en toda Europa, desde Escocia hasta España, pero por razones aún sin aclarar, ésta no fue terminada, aunque sus cimientos permanecen como la muestra del gran proyecto que entrañaba. La explicación oficial es que se gastó tanto dinero en decorar la parte terminada del edificio, que no quedaron fondos para el resto. Hay también otra explicación, propuesta por los ya mencionados Christopher Knight y Robert Lomas. Según estos investigadores, se dejó la capilla de Rosslyn sin terminar como símbolo de las ruinas del templo de Salomón, donde los primeros nueve templarios supuestamente encontraron manuscritos con las enseñanzas secretas de Jesús, así como distintas reliquias. Puede que esta capilla esconda el Arca de la Alianza y otros tesoros de gran valor.

      Existe una macabra leyenda asociada a esta capilla. Parece ser que el masón encargado de construirla recibió un patrón de una columna, de diseño exquisito, que había de ser levantada a la entrada de la catedral. No quiso empezar hasta ver el original, bien en Roma o donde quiera que fuere. Por lo tanto, viajó al extranjero y, durante su ausencia, el aprendiz construyó la columna, según se cree, después de soñar cómo era. Cuando el masón regresó le invadió la envidia al comprobar la perfección y exactitud del trabajo de su sencillo aprendiz y, preso de cólera, le asestó un golpe de mazo provocándole la muerte. Desde entonces, a unos metros del suelo, hay un busto de piedra del aprendiz con una herida en la cabeza, concretamente en el hemisferio derecho.

      Para Tim Wallace-Murphy, coautor, junto a Trevor Ravenscroft, de The Mark of the Beast (La marca de la bestia), la cabeza herida de este masón simboliza el cambio de conciencia de la humanidad desde lo espiritual e intuitivo a lo racional, que es lo que ocurrió a partir del siglo XV. Desde el asesinato del aprendiz, la columna que fuera la causa de su desgracia, se llamó «columna del Aprendiz», cuyas tallas representan el Árbol de la Vida y equivale a la Boaz del Templo de Salomón y los templos masónicos. La otra columna, que debería representar a Jaquin, no está en Rosslyn, y se cree que debe estar en alguno de los lugares de Europa visitados por el maestro masón, al final de un alineamiento de catedrales que representan la Tierra como un templo.

      Conocedores del significado de las columnas del templo de Salomón y del Alto y Bajo Egipto, el arco sobre la columna desconocida y la del Aprendiz sería una constelación de estrellas: la Vía Láctea. Es curioso observar que en la capilla de Rosslyn hay una gran profusión de lilas talladas en la bóveda, encima del coro. En el templo de Salomón, el arco sobre Boaz y Jaquin había sido decorado con lilas como símbolo de las generaciones futuras de la línea de sangre de Israel. Al lado de las lilas de Rosslyn hay muchas estrellas, talladas como imagen de la Vía Láctea.

      En su búsqueda de la otra columna, Ravenscroft y WallaceMurphy indagaron en toda la documentación que pudieron encontrar sobre William Sinclair, a fin de averiguar la fuente utilizada para dibujar el patrón de la columna que había proporcionado a su constructor. Parece ser que Sinclair poseía los registros nórdicos de los primeros viajes vikingos por el Atlántico hacia el continente americano, y los dos investigadores concluyeron que no sería descabellado pensar que el noble escocés hubiera enviado estos registros a Portugal para ayudar a este reino en sus expediciones transoceánicas.

      Esta deducción movió a Ravenscroft a visitar Portugal siguiendo el rastro de la otra columna, el Árbol de la Sabiduría. Después de cruzar Inglaterra, Francia y España en coche, llegó finalmente a su destino. Buscó la columna en Sagras, Lisboa y Coimbra, sin éxito. Finalmente, por pura casualidad, estando atrapado en un atasco, descubrió la columna en la plaza de Cintra, una pequeña ciudad cercana a Lisboa. La columna tiene casi tres metros de alto y está tallada con cuatro espirales dobles de follaje en relieve que giran alrededor de la columna en dirección contraria a las manecillas del reloj. Además de este detalle, la columna de Cintra es idéntica a la de Rosslyn. De todos modos, esta nueva columna parecía no tener relación ni con una catedral ni con una iglesia y se desconocía su origen. Sólo se sabe que fue construida a principios del siglo XV. A pesar de este detalle, Ravenscroft intuyó que había descubierto la columna Jaquin del templo apocalíptico en piedra.

      El número siete se repite continuamente en el Apocalipsis de san Juan: siete estrellas, siete candelabros

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