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De mujeres y partos. Mª José Alemany Anchel
Читать онлайн.Название De mujeres y partos
Год выпуска 0
isbn 9788437099705
Автор произведения Mª José Alemany Anchel
Жанр Медицина
Издательство Bookwire
Aquel trabajo con pretensión científica que las incorpora ha de sustentarse en la convicción de que los testimonios que grabamos y transcribimos han de pasar por un filtro crítico importante, el cual nos permitirá realizar una selección de los elementos utilizables. Esto no debe entenderse como que sólo se conservarán algunos testimonios elegidos, “sino que el investigador deberá saber distinguir separadamente el fenómeno histórico y la memoria que el individuo o sector de individuos guarda de aquel fenómeno” (Alcàzar, 1994, p. 236).
El uso de la fuente oral debe ser valorado porque nos permite avanzar en el conocimiento de los hechos pero, especialmente, en la forma en la que el grupo humano del que forma parte la informante los vivió y los percibió. De sobra está decir, pues, que “es de importancia capital rescatar la subjetividad, pero es un grave error llegar a confundirla con hechos objetivos” (Alcàzar, 1994, p. 236). Este componente de la subjetividad no debe quedar fuera del corpus de la investigación porque la percepción, los sentimientos y el modo de expresarlo, son elementos que nos pueden ayudar a configurar esa historia que no es ni más ni menos que la historia de las matronas que trabajaron durante los años estudiados en el cuidado de las mujeres mientras daban a luz a sus hijas e hijos. Coincidimos con Alcàzar en que la aproximación crítica a la fuente oral se consigue estableciendo una relación dialéctica entre los diversos tipos de fuentes que tengamos a nuestra disposición; es decir, mediante dos procedimientos de carácter interactivo: el primero con la documentación escrita existente y el otro con el resto del corpus de documentos orales. Es la adecuación de la figura singular con un medio y una época lo que busca el historiador, cuyo verdadero tema es el contexto histórico en sí mismo más que la persona entrevistada.
La utilización de fuentes orales en este trabajo pretende rescatar la memoria histórica de algunas de las matronas que trabajaron en distintas instituciones sanitarias, tanto en Valencia como en otras ciudades españolas, en la segunda mitad del siglo XX. A partir de su testimonio recogeremos los posicionamientos personales que son producto de las circunstancias o vivencias individuales que tuvieron, pero también extraeremos los planteamientos que forman parte del discurso colectivo del grupo al que pertenecían y que como cualquier grupo profesional tiene su propio lenguaje y sus propias convicciones que están relacionadas con las posiciones hegemónicas del discurso científico del momento. Asumimos que cada una de las memorias recogidas puede sintonizar o entrar en contradicción con la de alguna otra profesional entrevistada, lo que nos permitirá conformar las distintas lecturas sobre el pasado y superar planteamientos esencialistas o monolíticos. Los problemas de las contradicciones entre las diferentes memorias del pasado pueden verse agravados por el lugar que cada informante ocupaba dentro de la jerarquía hospitalaria o por la clase social a la que pertenecían. No pretendemos rescatar la verdad en el sentido convencional del término, sino que intentaremos hacer visibles tanto los recuerdos como los olvidos, conscientes como somos de que la memoria individual es valorativa y categórica. Por tanto “...todo lo que en la memoria es exaltado y contrastado, en el campo del saber de los historiadores es opaco y matizado” (Romero, 2006).
Entendemos que rescatar y dar valor a esta memoria histórica nos proporcionará claves transversales para entender el papel que jugaron las matronas en el cambio que supuso la institucionalización del parto en el medio hospitalario. Utilizar sus testimonios como fuentes orales es recoger las experiencias vitales como máxima expresión de estas actoras, hasta ahora anónimas, que se conforman como un elemento clave para construir la interpretación histórica de nuestro pasado sanitario reciente.
Pero vayamos por partes. El primer aspecto sobre el que conviene reflexionar es el de los problemas teóricos y técnicos que suscita el trabajo con fuentes orales. Para conseguir el máximo de información y que ésta sea lo más fiable posible se hace necesario seguir unas normas básicas de rigor científico y metodológico teniendo en cuenta dos aspectos: a) la relación dialéctica que se puede establecer entre las fuentes orales y los documentos como se ha dicho anteriormente, lo cual nos permitirá medir la distancia entre lo dicho y lo no dicho [olvidado, silenciado, ocultado] (Joutard, 1986) y b) que una entrevista concreta no es más que una parte del conjunto más amplio de las personas que conforman la muestra. En opinión de Mercé Vilanova la palabra recogida ilumina el escrito, enriqueciéndolo y dándole un contexto humano debido a que aporta elementos subjetivos y literarios, que tiene una influencia desmitificadora, que rompe el aislamiento elitista de los archivos y porque una historia social que pretende ser mayoritaria no puede olvidar la visión que de ella tienen las personas que fueron elementos clave de la misma (Vilanova, 2005, pp. 5-19).
En cuanto a las cuestiones de carácter metodológico, cuando desde la disciplina histórica se quieren utilizar fuentes orales, es preciso tener en cuenta una serie de elementos antes de iniciar el trabajo de campo. Se debe elegir el universo de la muestra que es el número de personas que pueden actuar como informadoras y que viene determinado por coordenadas cronológicas, geográficas, culturales, profesionales, sociales e, incluso, sexuales. A partir de este momento se define una muestra que tenga representatividad sociológica y estadística, esta última característica siempre que estemos hablando de encuestas cerradas que pueden tratarse estadísticamente, y puede elegirse de manera aleatoria entre todas las personas que podrían ser entrevistadas. Es importante determinar con claridad cuál va a ser nuestro universo de la muestra con el propósito de que ésta sea representativa. Dentro de ese universo pasaremos a realizar una elección aleatoria entre todas las informantes y este grupo constituye la muestra. En ese sentido, la persona que investiga tiene que estar en condiciones de explicar por qué se han elegido unos testimonios en vez de otros.
Una vez elegida la muestra hay que planificar una estrategia para entrevistar a las informantes. No existe un modelo ideal de cuestionario sino que cada investigador deberá determinar a priori su estrategia para interrogar conciliando la muestra de testimonios y sus circunstancias, con los intereses de la investigación. Nos referimos en este caso a elaborar una guía de preguntas genéricas que puedan facilitar el trabajo del investigador y que nosotros proponemos que sea semiestructurada para que garantice que se van a tratar los temas que consideramos fundamentales para nuestro trabajo, pero dejando libertad a la persona entrevistada para que profundice o se extienda lo que considere oportuno. Es conveniente mantener una charla inicial sin grabaciones para establecer un clima de empatía que nos permita, una vez finalizada la sesión, completar el testimonio si fuera necesario. Esta relación de empatía entre el sujeto informante y la persona que realiza la entrevista debe conseguirse manteniendo una distancia justa, donde se simultanearán momentos de complicidad y tomas de distancia objetiva para mantener el hilo conductor, ambos necesarios para la investigación (Dosse, 2007, p. 14). Es importante evitar que la persona que es entrevistada sienta que debe arrojar un cúmulo de información sin coherencia y a modo de discurso erudito. Debe sentirse cómoda con su forma de hablar, de gesticular, de usar el lenguaje y no fingir o querer aparentar lo que no es. Conseguir este clima es nuestro trabajo (Alcàzar y Pinazo, 2013).
Durante el desarrollo de la entrevista consideramos que las intervenciones del investigador deben ser mínimas y lo más breves posibles. Simultáneamente, es aconsejable animar al informante relacionando lo que está diciendo con otras informaciones, descubriendo sus estructuras ocultas, comparando la información obtenida con las hipótesis teóricas previas y clarificando el contenido según la importancia que el historiador le conceda (Berg, 1990). Una vez realizada la entrevista se procede a la transcripción integral de las grabaciones para hacer inteligible la versión escrita, sin perder el tipo de lenguaje original, los giros dialectales o la terminología utilizada, respetando la idiosincrasia del discurso de la informante. El resultado obtenido en las entrevistas debe ser sometido a un análisis de contenido, fragmentando el texto temáticamente, todo lo cual formará la parte central de la metodología de la historia realizada a partir de fuentes orales como cualquier otra fuente primaria, o de un estudio estadístico, en el caso de que se trate de encuestas. Cabe señalar también que los datos extraídos de las entrevistas también pueden tratarse en clave cuantitativa para hacer estudios estadísticos como sistematizar las opiniones atendiendo a criterios como la edad, centro de trabajo, etc.
Para conformar las fuentes primarias de este trabajo hemos realizado entrevistas en profundidad a cincuenta y dos matronas que desempeñaron su profesión