Скачать книгу

desarrollados (Táctica colectiva)

      – Suma de acciones individuales debidamente coordinadas. Como principio fundamental, se asienta en la acción individual, y su eficacia radica en la elección, así como en el nivel de interpretación (Bárcenas, 81).28

      – Suma de acciones individuales o de coordinación entre varios jugadores, para obtener resultados óptimos de conjunto, que puedan motivar situaciones de ataque ventajosas (Falkowsky/Enríquez, 79).29

      – Coordinación entre dos o más jugadores, utilizando procedimientos adecuados para lograr los objetivos del ataque y de la defensa (Bárcenas/Román, 91).30

       Metodología de aplicación

      A pesar de que las combinaciones tácticas colectivas puedan parecer, por las definiciones dadas y por su tratamiento parcializado en el libro, elementos inconexos de diferente estructura y distinta aplicación en situaciones de juego, pienso que podemos establecer alguna indicación, que revierta en favor de un tratamiento homogéneo tal que posibilite establecer nexos de unión entre las mismas:

      1. La progresión metodológica en cada combinación.

      2. La aplicación de los principios tácticos de ampliación y ocupación del espacio.

      3. La concepción del tipo de tarea a aplicar.

       LA PROGRESIÓN METODOLÓGICA EN CADA COMBINACIÓN

      En las diferentes situaciones tácticas colectivas recogidas en su capítulo correspondiente, puede en general constatarse la diferenciación entre un trabajo sin oposición y con oposición.

      Debemos hacer notar que es necesario un proceso de adquisición, que puede en cierta forma compararse al seguido para el desarrollo de los elementos técnico-tácticos individuales. Un trabajo sin oposición inicial es necesario como medio para conseguir la coordinación espacio-temporal entre dos o más jugadores. El trabajo se centra en el perfeccionamiento de esa coordinación de gestos. En algunos deportes se utiliza la acepción “técnica colectiva”, al referirse a este tipo de situaciones. En ellas es necesario un constante cálculo de distancias, trayectorias y velocidades propias del compañero, así como del balón (si lo hubiere).

      En un segundo momento, que debería llegar lo antes posible, se hará necesario realizar una traslación de esas acciones al juego real, para efectuar con oposición, un trabajo de adaptación de esas combinaciones tácticas, en el contexto de una situación variable.

       LA APLICACIÓN DE LOS PRINCIPIOS DE AMPLIACIÓN Y OCUPACIÓN DEL ESPACIO

      Podemos afirmar que por encima de cualquier parámetro disgrega- dor en cuanto a las modalidades de presentación de las combinaciones tácticas colectivas, subyacen unos principios tácticos comunes para todas ellas. Nos estamos refiriendo a los conceptos de ampliación y ocupación del espacio.

      Pienso que partir de estos principios como modelo explicativo inicial de cualquier acción de base colectiva, conseguiría unificar criterios respecto a la forma de trabajo a utilizar.

      Cojamos como ejemplo el cruce: este elemento podemos analizarlo y entrenarlo desde el punto de vista de sus formas de ejecución (cruce simple, cruce con trayectoria falsa, falso cruce...). El jugador conoce modelos de ejecución, que no necesariamente asocia a una misma estructura, pues su adquisición se produce a partir del análisis de sus elementos diferenciadores. Sabe que uno es diferente del otro, pero difícilmente podrá relacionarlos, pues deben ser entrenados por separado como tres elementos distintos. Desde el punto de vista táctico, no se plantea una explicación que justifique la diferencia. Se plantean tres modelos distintos de ejecución, como hemos dicho.

      Uno de los problemas que aparecen con este planteamiento de trabajo es que generalmente genera respuestas de tipo cerrado. Un jugador es entrenado para realizar un cruce simple, o un cruce de trayectoria falsa, pero difícilmente podrá variar su ejecución inicial, dado que el planteamiento de formación se basa en la ejecución del elemento, de forma coordinada, con el compañero. Observamos, como consecuencia y bastante frecuentemente, la realización de movimientos mecanizados de cruce, que no presentan más que un modelo de coordinación entre atacantes, sin considerar la reacción defensiva, ni la situación del juego (movimiento estereotipado).

image

      Gráfico 2

      Desde el punto de vista de aplicación a una situación de juego, deberíamos ofrecer un paso más que considerase el factor táctico de adaptación. En su ejecución simple, iniciador y beneficiario del cruce, deberían considerar su actuación como una coordinación en el tiempo de acciones de ampliación del espacio.

      Metodológicamente y bajo esta perspectiva, la acción individual de decisión es mucho más importante, pues se toma en consideración el desarrollo de las capacidades intelectuales del individuo.

      Partimos de la idea clara, de que el iniciador (poseedor del balón), debe tratar de ocupar el espacio libre, a poder ser en trayectoria de penetración, hasta la línea de 6 m. Por tanto, toda trayectoria del iniciador no orientada hacia portería, debería ser considerada tácticamente incorrecta (por ejemplo, ir a buscar al jugador impar), pues limitamos el espacio y las posibilidades de actuación de nuestro compañero.

image

      Gráfico 3

image

      Gráfico 4

      En función (y sólo en función) de la reacción del defensor, el posible beneficiario de la acción decidirá cuál debe ser la trayectoria a utilizar. Las posibilidades son las siguientes:

      – Ante la no atracción del defensor impar, ni del par, el jugador iniciador deberá ocupar él mismo el espacio libre. Realizar este pase de balón en esta circunstancia, tácticamente sería un error (situación de falso cruce).

image

      Gráfico 5

      – Ante la atracción defensiva del iniciador, el beneficiario deberá decidir cuál es el espacio o intervalo mayor para realizar una trayectoria de ocupación del mismo. En este caso, el iniciador ha realizado una correcta acción de ampliación del espacio.

image

      Gráfico 6

      La situación siguiente plantea la posibilidad de haber ampliado más el intervalo correspondiente al espacio que ocupaba el defensor impar del iniciador. El beneficiario tratará de ocuparlo (cruce con trayectoria falsa).

image

      Gráfico 7

      La situación posterior plantea una posibilidad diferente. El intervalo ampliado por el iniciador es mayor en la zona que ocupaba su defensor par. El beneficiario debería tratar de ocupar ese espacio libre (cruce simple).

image

      Gráfico 8

      Como podemos observar, desde esta perspectiva del entrenamiento, y a partir de unos principios comunes, conseguimos desarrollar las tres modalidades de ejecución antes comentadas (cruce simple, cruce de trayectoria falsa y falso cruce).

      Los principios de ampliación y ocupación son asimismo aplicables a cualquier otra combinación táctica colectiva. Se manifiesta clarísima, por ejemplo, la diferencia entre el bloqueo estático y dinámico, atendiendo a la ampliación y ocupación de espacios por parte del bloqueador.

      En la primera situación, el iniciador del bloqueo (pivote), lleva a la práctica

Скачать книгу