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El Sacro Imperio Romano Germánico. Peter H. Wilson
Читать онлайн.Название El Sacro Imperio Romano Germánico
Год выпуска 0
isbn 9788412221213
Автор произведения Peter H. Wilson
Жанр Документальная литература
Издательство Bookwire
Por lo general, tales propuestas iban en contra de los intereses de los Habsburgo, los cuales solían sabotearlas y presentaban a los príncipes como unos necios manipulados por los pérfidos franceses. Aun así, la opción de una Reichsmediation colectiva del Reichstag continuó teniendo un peso moral considerable desde que se propuso por primera vez en 1524 para poner fin a la guerra de Carlos V contra Francia. Fernando III recuperó la influencia perdida por los Habsburgo al comienzo de la Guerra de los Treinta Años cuando invitó a los Estados imperiales a participar en el congreso de Paz de Westfalia. La permanencia del Reichstag a partir de 1663 ofreció nuevas posibilidades, pues la presencia de enviados de la mayoría de Estados europeos le dio el carácter de un congreso internacional.112 En cada una de las guerras principales subsiguientes hubo ofertas de mediación, pero estas siempre se veían frustradas por la oposición de los Habsburgo y por las crecientes dificultades ceremoniales planteadas por las discrepancias entre Estados imperiales y soberanos europeos.
Las limitaciones del imperio como pacificador activo no redujeron el interés por su lugar dentro de la paz continental, en particular entre aquellos insatisfechos con el enfoque de libre mercado dado a la paz basado en el autorregulado, supuestamente, «balance de poder». Dado que el imperio había representado un orden universal idealizado durante el Medievo, no debe sorprendernos que, a partir del siglo XVI, algunos autores también vieran en este un modelo para un sistema común europeo. Destacados representantes de esta idea fueron el filósofo político Samuel von Pufendorf, el abate de St. Pierre, William Penn, Jean-Jacques Rosseau e Immanuel Kant. Estos proponían que los Estados cedieran al menos parte de su soberanía a una o más instituciones comunes inspiradas por el Reichstag y las cortes supremas del imperio y daban una visión positiva del mismo en una época en la que otros consideraban que estaba en declive terminal.113 Pero sus debates idealizados guardaban escasa semblanza con las realidades políticas y sociales del imperio. La paz imperial continuó anclada en métodos de consenso premoderno y en la defensa de los derechos corporativos, ideas que chocaban con los nuevos ideales de soberanía, derechos individuales y (después de 1789) control popular del poder hegemónico del Estado.
1 Tracy, J. D., 2002, 239-240. Véase también Headley, J. M., 1978, 93-127, en especial 116; Rosenthal, E., 1971, 204-228.
2 Dagron, G., 2003; Dvornik, F., 1966; Nicol, D. M., «Byzantine political thought», en Burns, J. H. (ed.), 1988, 51-79.
3 Luttwak, E. N., 2009.
4 Collins presenta un resumen de las diferencias teológicas en Collins, R., 1991, 266-268; Southern, R. W., 1970, 62-65.
5 La relación de los otónidas con Polonia y Hungría se explora más en profundidad en las páginas 204-207. Véase también al respecto Frazee, C. A., 1976, 166-184; Stokes, D. R., 2014, 156-161.
6 Müller, K., 1986, 1-23, 13-14.
7 Ohnsorge, W., 1947. Con respecto a los conflictos entre imperiales y bizantinos en Italia, vid. 187-192.
8 Nelson, L. H. y Shirk, M. V. (eds.), 1972; Koch, G., 1972, 218-230; Latowsky, A. A., 2013, 44-51.
9 Becher, M., 2012, 245-251; Weinfurter, S., 1999, 28-29. Para una visión general de los contactos entre imperio y Bizancio, vid. Leyser, K., 1982, 103-137. Acerca de Teófano, véase también 314.
10 Frankopan, P., 2012.
11 Treadgold, W., 2001, 215-216, 236.
12 Angold, M., 2012.
13 Koch, G., op. cit., 227-229.
14 Cameron, A., 2010, 163-166; Burke, P., 1980, 21-29; Hale, J., 1993, 3-50; Wolff, L., 1994 y las contribuciones de Pocock, J. G. A. y Jordan, W. C., en Pagden, A. (ed.), 2002.
15 Çirakman, A., 2002; Höfert, A., 2003; Faroqhi, S., 2007; Wrede, M., 2004, 66-216; Sutter Fichtner, P., 2008, 21-53.
16 Dale, S. F., 2010.
17 Finkel, C., 2005.
18 Barkey, K., 2008, 101-108; Almond, I., 134-146.
19 Darwin, J., 2008, 37-38; Burbank, J. y Cooper, F., 2010, 70-78.
20 Althoff, G., 2005, 111-112.
21 Kostick, C., 2010, 125-142; Loud, G. A. (ed.), 2013, 48-55. Véanse también las fuentes citadas en la pág. 775.
22 Stürner, W., 2009, II, 68-74, 85-98, 130-169; Almond, I., op. cit., 49-74.
23 Scales, L. E., 2012, 221-224.
24 Hödl, G., 1978, 195.
25 Elliott, J. H., 1963, 45-76. Polonia también tenía una tradición propia de «bastión de la Cristiandad»: vid. Davies, N., 2005, I, 125-130.
26 Vryonis Jr., S., 1969-1970, 251-308.