Аннотация

El mundo cristiano a través de la historia ha enfrentado grandes desafíos en su intención de mantenerse vigente y contextual para cada generación. Seguir a Jesús en el siglo XXI puede significar algo muy diferente a lo que el mundo del primer siglo concibió. Entender sus declaraciones en nuestros tiempos puede convertirse hoy en día en algo más que un simple ejercicio hermenéutico. Puede resultar más bien en una multiplicidad de opciones con las cuales cada quién establece sus propias decisiones.
Esta obra nos permitirá adentrarnos en la complejidad del pensamiento posmoderno en relación con los valores cristianos y el desafío que supone esta forma de concebir el mundo para el creyente actual o simplemente para quien se interese en contextualizar un mensaje proclamado hace 20 siglos atrás en los caminos de Galilea, Judea y sitios aledaños. Frente a la relativización de la verdad, la desconfianza en los metarrelatos, la pluralidad o el sincretismo en cuestiones religiosas y la muerte de los ideales, es muy importante tratar de dilucidar el espacio de acción del mensaje de Jesús y su aplicación para esta generación.

Аннотация

"Una semilla para cada día" surgió como una recopilación de los mensajes diarios que el autor ha estado enviando a cientos de personas en diferentes lugares del mundo a través del correo electrónico. Tras la buena acogida que han recibido, ahora se convierte en un libro devocional para que pueda llegar a muchas más personas de habla hispana. A través de historias e ilustraciones se lleva al lector a la meditación en la palabra de Dios y el mensaje diario que nutre la vida de quien practica la disciplina espiritual de la lectura devocional diaria. Se ha elaborado con el propósito de convertirlo en una lectura constante que fortalezca a quien lo sigue en su jornada espiritual.

Аннотация

Del lamento a la revelación es un libro creado en medio de la pandemia que aqueja al mundo entero. El propósito de su escritura es plantear desafíos para la iglesia en estos tiempos. Al concebirla, Jesús pensó en una iglesia que le representara adecuadamente en cada momento de la historia, ya fueran buenos o malos. Sin embargo, cuando la crisis llega las dudas aparecen y de pronto la iglesia se convierte en una extensión del mundo con sus mismos lamentos y quejas. Por eso es tiempo para reaccionar y entender que como ciudadanos de un nuevo reino no podemos quedarnos en el lamento, debemos ir a la revelación en Cristo para conocer sus propósitos en medio de las aflicciones. Es tiempo de tomar el lugar que nos corresponde y vivir de acuerdo con nuestra condición como hijos de Dios. Es tiempo de pasar del lamento a la revelación.