ТОП просматриваемых книг сайта:
La tiranía de los Derechos. Brewster Kneen
Читать онлайн.Название La tiranía de los Derechos
Год выпуска 0
isbn 9789874039194
Автор произведения Brewster Kneen
Жанр Математика
Серия Tierra indómita
Издательство Bookwire
La tiranía de los derechos
Brewster Kneen
Traducción: Lilian Joensen
Knenn, Brewster La tiranía de los derechos / Brewster Knenn. - 1a ed . - Ituzaingó : Cienflores , 2020. Libro digital, EPUB - (Tierra indómita. 1 ; 2) Archivo Digital: descarga Traducción de: Lilian Joensen. ISBN 978-987-4039-19-4 1. Estudios Culturales. I. Joensen, Lilian, trad. II. Título. CDD 306 |
© Knenn, Brewster
© Editorial Cienflores, 2013.
Editorial Cienflores
Lavalle 252 (B1714FXB), Ituzaingó, Provincia de Buenos Aires.
Tel: +54-011-2063-7822 / email: [email protected]
Traducción: Lilian Joensen
Editor responsable: Maximiliano Thibaut
Obra de tapa: “Adentro”, Dibujo sobre papel, 70 x 70 cm., de Rocío García.
Queda hecho el depósito que previene la ley 11.723
Por decisión del autor y los editores cualquier parte de esta obra puede ser utilizada y reproducida para fines de enseñanza e investigación. Cualquier otra forma de reproducción queda sujeta a la autorización de los mismos.
Índice
Prólogo por Jorge Eduardo Rulli
Introducción de la versión en castellano
Una nota acerca de la terminología
El Individualismo de los Derechos
El surgimiento de los Derechos como discurso dominante
La falsa presunción de Universalidad
Derechos de propiedad: humanos y corporativos
Derecho de propiedad y Derecho a la propiedad
Derecho a la alimentación y el plato vacío
Derechos de los campesinos y derechos de los fitomejoradores
Derechos y Recursos: de Creación a Mercancía (Commodity)
Los Derechos de la Naturaleza: plantas, animales y peces
Tener y detentar: los derechos de intelecto
Derecho a morir la muerte de uno mismo
Agradecimientos
Este libro no fue el resultado de una revelación divina. Creció de las conversaciones y debates, durante varios años, con muchos colegas y amigos —son demasiados para que los nombre individualmente. Agradezco a todos ellos por su persistencia y generosidad. Debo, sin embargo, hablar específicamente de nuestros vecinos indígenas Secwepemc, cuando vivíamos en la Columbia Británica, que nos aceptaron y me educaron en sus formas y actitudes tradicionales.
También tengo que reconocer el aliento y las obstinadas críticas, junto con el dedicado trabajo editorial de Cathleen, mi cómplice durante todos estos años.
Un agradecimiento muy especial a Lilian Joensen por su hábil traducción de esta edición en castellano.
Prólogo
Hoy, la condición del ser humano está definida por su capacidad de consumo. El hombre es o vale fundamentalmente, por su disposición a comprar y consumir. El planeta tierra ha devenido de esta manera, en un supermercado mundial que el hombre enajenado, recorre con afán de satisfacer las necesidades que el propio sistema se encarga de generarle, para alimentar los mercados y para que no cese de hacer girar la rueda de la oferta y la demanda.
El fantasma que finalmente terminó recorriendo el mundo se llamó Progreso. Parido por la modernidad, libró una guerra de conquista sobre la Naturaleza, a la que buscó dominar y subyugar a lo largo de los últimos tres siglos. El altísimo precio que se está pagando por esa gesta demencial, parece no ser suficiente para una gran parte de la humanidad, que observa indiferente o quizá anonadada, las consecuencias de una carrera hacia un final que se encuentra anunciado. Es probable que la naturaleza, que hizo posible y cobijó nuestra existencia, sucumba ante el poderío tecnológico desplegado por el hombre y por el sistema tecnocrático que ha generado, pero ese día del triunfo final, será también el último día de la especie humana sobre el planeta.
En la Argentina, el paradigma del progreso asienta sus bases en la dicotomía que alguna vez supo plantear Sarmiento: la de civilización o barbarie. En ese paradigma, la ciudad fue erigida como símbolo de la razón y del progreso, en tanto que la naturaleza, fue sinónimo de oscuridad y de retraso. En nombre de esos postulados se perpetraron infinidad de matanzas de indios y de gauchos, y el campo ha llegado a ser visto como un equivalente de pobreza y enemigo de una idea de civilización que se basa en los Agronegocios y que postula la industrialización de la ruralidad.
El modelo desarrollista omnipotente, impulsado a finales de la década del cincuenta, y replicado actualmente por diversas capillas intelectuales que postulan políticas de crecimiento, es hijo directo de ese paradigma de progreso que enarboló la generación del ochenta, cuyas cabezas más visibles fueron Sarmiento, Roca y Avellaneda. El desarrollismo y sus diversas variables progresistas, son de ese modo, la acabada expresión del enfrentamiento entre el hombre y la naturaleza.
Nos rige un modelo neo oligárquico que asistencializa la pobreza y la hacina en las periferias urbanas, ese modelo es la continuación de aquellos desarrollismos del