Аннотация

Posee movimiento y deviene palabras, imágenes, trazos, velocidades, fuerzas, volúmenes, texturas; se niega a adoptar un formato establecido y único. Travieso, caótico, juega con nosotros. En lugar de sostenerse sobre pilares fijos y estáticos, los recrea; fiel e infiel a la rebeldía, transgrede la clasificación. La rebeldía de la infancia no es un libro teórico ni uno práctico; no es una guía ilustrada ni un artefacto para jugar o contemplar, aunque tenga algo de todo eso. Rebelde, plebeyo en su esencia, configura la hospitalaria sensibilidad de una escritura en potencia, de un ritmo ficcional que puede ser o no la metamorfosis de un gesto. Nos convoca a todos a una creativa e intensa travesía y, al recrear ese recorrido en estas páginas, nos ofrece la posibilidad de recuperar y donar lo infantil de la infancia venidera. ¿Acaso existe alguna curiosidad que no traiga consigo la chispa de la niñez?

Аннотация

La psicomotricidad es un punto de encuentro entre la realidad neuromotora del desarrollo y la constitución subjetiva, a través de la realización en acto de una experiencia significante cuya travesía deja huellas que historizan cada subjetividad. En el campo psicomotor es esencial la realización del gesto como experiencia fundante de la subjetividad. La gestualidad permite que los niños se emancipen del órgano carnal y los introduce en un mundo imaginario (pleno de imágenes para reflejarse, atravesar y refractarse), simbólico (conformado por la legalidad del lenguaje y la cultura) y real (en tanto límite y causa de la experiencia).

Аннотация

Este libro refleja la gestación de un pensamiento en acto frente a las coyunturas disruptivas que fijan, encierran y desacreditan la experiencia subjetiva y comunitaria. Ante la desdicha y la incertidumbre de esta época que nos afecta a todos y, en particular, a los niños, la obra plantea la natalidad de un tercer tiempo, una zona de subjetividad en la que se inventa la realización sensible de los sucesos que parecían inviables. Resistimos, rompemos la incredulidad y creemos en la posibilidad de lo imposible. Para ayudar a los más pequeños, reafirmamos la alianza con ellos y sus padres: no los dejamos solos. Imaginamos recursos para constituir una experiencia que, al ser realizada, permita a la imagen del cuerpo salir fuera de sí, romper la soledad del sufrimiento del aislamiento y volver para recrear otra escena, un acontecimiento de la infancia en el que coexistan el cuerpo, la ficción y el sujeto. Mantener viva la experiencia infantil es la fuerza deseante, afectiva, que nos permite rescatar la vitalidad de la niñez y de la comunidad del nos-otros.

Аннотация

No es el mundo en sí el que da lugar a los niños, sino el acto de jugar el que origina la posibilidad del universo infantil. ¿Cómo rescatar su sensibilidad, la imagen del cuerpo, la plasticidad, si no pueden o tienen dificultades para jugar? ¿Es posible diagnosticarlos sin jugar con ellos? Frente a la certeza del poder de turno para diagnosticar la vida de un niño y determinar la de sus padres, lo escolar, la integración o exclusión cultural defendemos la incerteza de la dimensión desconocida y lo provisorio del diagnóstico. No hay infancia sin futuro y no hay futuro sin infancia, pero tampoco hay niñez sin pasado, ni pasado sin niñez. Al jugar, los niños descubren e inventan al mismo tiempo una dimensión secreta y desconocida, no con la finalidad de conocer, sino para habitar su existencia. A contracorriente, este libro comienza cuando termina y finaliza donde empieza. Movimiento en red que desafía al lector en el acto de leer para crear un vacío de saber todavía desconocido. La infancia es el destino.

Аннотация

Todas las infancias pasan, menos aquellas en las que los diagnósticos invalidantes, el sufrimiento y el dolor de existir detienen el tiempo, bloquean la imagen corporal, el juego, la relación con los otros y cuestionan la experiencia infantil. Los problemas en la infancia, ¿pueden interrumpir la temporalidad de la subjetividad, del desarrollo y la experiencia de los niños? El tiempo es un movimiento afectivo dinámico, vital, cambiante; siempre es otro que no se puede imaginar antes de vivirlo; no pertenece a nadie y mucho menos a los diagnosticadores. Los niños son sensibles espejos del tiempo. Las infancias desplegadas en esta obra no pueden reflejarse en ellos ni construir su memoria. Paralizados, acorralados en el cuerpo, en la acción, en los síntomas, o en los miedos nos demandan. ¿Seremos capaces de leer, escuchar, donar y crear el tiempo en devenir de los más chicos, los niños? «Todos los niños crecen, menos uno»: así comienza la intrépida historia de Peter Pan. Y con ella se configura el eje de esta nueva propuesta de Esteban Levin.

Аннотация

Аннотация