Аннотация

Las evaluaciones disponibles muestran que en nuestro sistema educativo se aprende poco; lo que se aprende no es lo que requiere el mundo contemporáneo; los docentes están mal formados; solo el 50% de los estudiantes termina la escolaridad obligatoria, y los jóvenes no egresan preparados para entrar al sistema laboral. La pandemia por COVID-19 terminó de correr el velo que cubría este franco derrumbe y la falta de interés de los responsables por cualquier mejora en materia de educación. Pero ¿cómo se inició esa crisis terminal? ¿Cuándo fue que aquel proyecto que se proponía igualador, de principios del siglo xx, se convirtió en una máquina de reproducir las desigualdades de origen de los estudiantes? ¿Qué se hizo tan mal para que el resultado fuera este? ¿Cuándo se dejó de enseñar y se pasó a simular? ¿Cómo revertir esta catástrofe? Con más de cuarenta años dedicados a la investigación en educación, Guillermina Tiramonti denuncia y analiza en este libro el paulatino avance del asistencialismo en las aulas, el desarrollo de una pedagogía de la compasión que actúa sobre las conciencias, abandona la preocupación por los aprendizajes de los alumnos y menosprecia su función impulsora del progreso individual. Y además reflexiona y acerca propuestas para que nuestra educación comience a dialogar con las problemáticas del presente y el mundo del futuro.