Аннотация

Este libro se centra en la región norte del estado de Jalisco, ámbito espacial en donde se encuentran una sociedad de rancheros mestizos y el pueblo wixárika. Se busca tender un puente entre el pasado colonial y el presente para comprender la realidad regional actual del norte de Jalisco, por lo que se inscribe dentro de la etnohistoria, disciplina antropológica que conjuga la historia y la antropología. El análisis de la etnografía histórica (que encontraremos en la lectura cuidadosa de los documentos de archivo, las relaciones de viajeros, los informes de párrocos y militares, entre otros) y la etnografía actual aportan los elementos necesarios para entender la dinámica de las regiones, las continuidades y las rupturas. Para visualizar los cambios regionales se realizó un trabajo de campo en cinco de los diez municipios que comprende el norte de Jalisco y los hallazgos se compararon con la descripción del gobierno de las Fronteras de Colotlán, efectuada por Félix María Calleja hacia 1790. Así, el documento de Calleja, en el contexto de las reformas borbónicas, es contrastado con la etnografía de una región ganadera en proceso de transnacionalización en el marco de las reformas neoliberales.