Аннотация

In the past four decades Native American/First Nations Literature has emerged as a literary and academic field and it is now read, taught, and theorized in many educational settings outside the United States and Canada. Native American and First Nations authors have also broadened their themes and readership by exploring transnational contexts and foreign realities, and through translation into major and minor languages, thus establishing creative networks with other literary communities around the world. However, when their texts are taught abroad, the perpetuation of Indian stereotypes, mystifications, and misconceptions is still a major issue that non-Native readers, students, and teachers continue to struggle with. To counter such distorted representations and neo/colonialist readings, this book presents a strategic selection of critical case studies that set specific texts within cross-cultural contexts wherein Native-based methodologies and key concepts are placed at the center of the reading practice. The challenging role of teachers and researchers as potential intermediaries and responsible disseminators of what Gayatri C. Spivak calls «transnational literacy» as well as the reception of Native North American works, contexts, and themes by international readers thus becomes a primary focus of attention. This volume provides a set of critical analyses and practical resources that may enable teachers outside the United States and Canada to incorporate Native American/First Nations literature and related cultural and historical texts into their teaching practices and current research interests in a creative, decolonizing, and responsible manner.

Аннотация

Los inicios de los estudios de género en el campo de la Historia del Arte se pueden ubicar en la década de 1970, a partir del artículo de la historiadora del arte estadounidense Linda Nochlin titulado «Why have there been no great women artists?». Este ensayo provocó una fuerte reacción académica, ya que ponía el énfasis en el hecho manifiesto de que la historiografía artística había ignorado a las artistas. A partir de ese estudio, y a pesar de haber sido silenciadas durante siglos, la comunidad científica comenzó a preocuparse por evidenciar la importancia que estas habían alcanzado a lo largo de la historia, dando con ello continuidad a la historiografía artística de los estudios de género. Fruto de ese interés surge este recorrido cronológico por la creación artística femenina en España durante los siglos XIX y XX, que cuestiona el relato hegemónico de la Historia del Arte desde distintos puntos de vista, sustituyéndolo por otro más acorde con la realidad. Para ello se ha analizado de forma global el proceso vivido por las creadoras de diversas disciplinas artísticas, con el fin de desentrañar qué artistas estuvieron en activo, en qué consistió su formación artística, cuál fue su perfil profesional, qué canales siguieron para la exhibición de sus obras, cuál fue la fortuna de su recepción crítica, qué lenguajes artísticos emplearon y cómo evolucionaron; en definitiva, cuál fue el lugar que ocuparon en la cultura artística.