Аннотация

El ajedrez es solo un juego del mismo modo que el corazón es solo un músculo. Se ha considerado durante mucho tiempo una metáfora de la guerra o de los negocios, pero es aún más potente aplicada a la vida cotidiana. Jonathan Rowson ha sido gran maestro de ajedrez y en estas páginas desvela los secretos que este juego le ha enseñado sobre la vida. Reflexiona sobre sus retos y alegrías, sobre lo que significa amar, pensar o preocuparse profundamente, y también sobre los conflictos e incertidumbres del mundo actual. El relato revela nuestra enorme interdependencia y se convierte en un elogio de la gente que nos rodea. «Uno sale sintiéndose más capaz de navegar no tanto por un tablero de ajedrez sino por el mundo que hay fuera de él» – Sarah Stein Lubrano, The School of Life